News Argentina

martes 1 de julio, 2008
Marcas contextuales
Desde Mendoza
por Graciela Distéfano
Marcas contextuales

“El arte y sus rasgaduras de la significación son efectivamente capaces de recorrer las fallas del discurso social y sus lapsus ...”
Nelly Richard

... para lo que injustamente sumergido en la opacidad del deshecho histórico reflote para contrastar incisivamente con el brillo de las mercancías y la neutralidad de los saberes técnico-ejecutivos” completo la cita, porque creo que se ajusta a dos acontecimientos de envergadura en el contexto provincial. En primer lugar ¿cómo no compartir la apuesta del significativo número de adolescentes (casi 700) que participaran en una épica que conjugó arte y ambientalismo en el concurso “Todos tenemos derecho a un ambiente sano”? Una propuesta que nacida hace casi un año culminó con la exposición en el C.C. Borges de los 20 trabajos seleccionados. Arte de chicos y chicas, estudiantes de escuela secundaria de un remoto pueblo del sur provinciano, capaces de rasgar la opacidad e introducir sus reclamos ante el lapsus social de la insensata contaminación de aires, suelos y aguas, que compromete presente y futuro. Compartieron y ambientaron la exposición el Grupo Unísono, formado por siete jóvenes artistas que actuaron como difusoras, coordinadoras y generosas impulsoras entre las 30 escuelas participantes. La movida fue organizada por las dos ONG: la Multisectorial del Sur y de la Fundación Valentín Bianchi, que aportaron el material informativo, plástico y premio. Un premio que consistió en el viaje a Buenos Aires con sus profesores para participar de la exposición en que sus trabajos fueron convertidos en gigantografías. No me cabe duda de que la singularidad de este acontecimiento perfora un discurso e instala preguntas molestas e indispensables.
Otra exposición, en el MMAM -promovida por la Facultad de Artes y producida y curada por Sergio Rosas- introduce elementos del contexto “La tierra, la arena y el polvo” a partir de lenguajes como la video-instalación, el objeto de arte y la escultura en el campo expandido para dar cuenta de lo que ocurre en el campo de la investigación artística y vincular ejes partir de esas herramientas visuales narrativas. 31 artistas y 13 proyectos confluyen en una temática tan local como universal. Pese a la heterogeneidad de lenguajes la unidad conceptual y el buen montaje lograron hilvanar relato visual interesante y entrar en diálogo con la otra propuesta de la misma sala “Territorios en la piel” de Alejandro Iglesias y Fabiana Pereira que exploran desde la fotografía digital las posibilidades de lo orgánico. Una restitución de lo real por el impacto de la luz y la mirada sensitiva.
Muchas otras cosas ocurren en Mendoza, ya que se han multiplicado los espacios y las propuestas desde ámbitos menos institucionalizados y que van formando parte de esas marcas que van distinguiendo un contexto y le proporcionan su singularidad.