News Argentina

jueves 17 de julio, 2008
OCA PRESENTA AL PERSONAJE DEL MES - TOMAS MALDONADO
Un hombre que siempre miró hacia el futuro
por Cristina Rossi
OCA PRESENTA AL PERSONAJE DEL MES - TOMAS MALDONADO
 

En estos dí­as el Museo Nacional de Bellas Aires brinda a sus visitantes una excepcional posibilidad para acercarse a la obra de Tomás Maldonado.

 

En estos dí­as el Museo Nacional de Bellas Aires brinda a sus visitantes una excepcional posibilidad para acercarse a la obra de Tomás Maldonado. Digo excepcional, en primer término, porque la cantidad de pinturas reunidas convierte a esta exposición en una oportunidad única para apreciar su obra pictórica. Además, el recorrido vincula las soluciones plásticas de los primeros tiempos con los programas estéticos, que los jóvenes concretos difundieron a través de manifiestos y revistas. Maldonado mantuvo esta inclinación hacia la reflexión teórica alrededor de todos los temas que ocuparon su vida, publicando numerosos libros que también se exhiben junto a algunos de los proyectos desarrollados en el área del diseño. Pero ésta es, además, una circunstancia excepcional porque simultáneamente se presenta la exposición Modelos de Ulm / 1953-1968, en la que se despliega la historia y los principios teóricos de la Escuela Superior de Diseño de Ulm, permitiendo una mejor inscripción de los trabajos que Maldonado encaró desde 1954, cuando partió hacia esa ciudad alemana para enseñar en la escuela que, más tarde, también dirigió.
Desde el joven entusiasta que participaba en las rebeliones estudiantiles mientras compartí­a el ideario de izquierda hasta el intelectual maduro que en estos dí­as visita Buenos Aires, se desarrolla una trayectoria destacada por su actitud crí­tica. Desconforme con la enseñanza académica impartida en la Escuela de Bellas Artes, ya en 1942 Maldonado suscribió al "Manifiesto de cuatro jóvenes", distribuido en el Salón Nacional de ese año. Al oponerse a sus maestros estos alumnos se ubicaron en el ojo de una tormenta que, justamente, buscaban agitar. Actitud rebelde que señaló el final de sus estudios en la Academia y dejó una marca indeleble para sus experiencias de confrontación. En poco tiempo, Maldonado también tendrí­a ocasión de compartir con algunos de sus maestros una encuesta publicada por la revista Contrapunto, enfrentando su respuesta a la del artista consagrado Antonio Berni, defensor del Nuevo Realismo. Desde ese momento, entonces, escribió copiosamente y participó en varios proyectos editoriales.
Junto a algunos amigos de la agrupación de arte concreto y a su entrañable hermano, el poeta Edgar Bayley, quien para evitar confusiones habí­a adoptado el apellido materno en 1945, se afilió al Partido Comunista y no desaprovechó el lugar otorgado por la flexibilidad reinante en el PCA en el perí­odo de la inmediata posguerra. Sin embargo, al radicalizarse la exigencia zdanoviana de alineamiento sobre el canon del realismo, rápidamente se quebró el espacio de tolerancia para el arte concreto que se ubicaba en las antí­podas de la figuración permitida y Maldonado encabezó la retirada de las filas partidarias.
También junto a los jóvenes nucleados en la Asociación de Arte Concreto Invención en 1946 apostó a una "invención integral" en la que una pintura invencionista exigí­a una arquitectura, composición urbaní­stica, poesí­a y música de la misma naturaleza. Luego, en la década del 50 integró otras agrupaciones que reunieron a las diferentes disciplinas, sea en las páginas de una revista como nueva visión, dirigida por él mismo, o en una galerí­a como Krayd, cuyas salas también marcaron un punto de confluencia entre pintores, arquitectos, músicos y poetas. En este perí­odo las preocupaciones de Maldonado se fueron volcando cada vez más hacia el diseño de producto y la comunicación visual, aspectos que continuó desarrollando en Europa.
Hoy como ayer los escritos y las obras de Maldonado invitan a conjugar en tiempo futuro, son los textos de un profesor reflexivo y habituado a mirar hacia delante, y las obras de un artista siempre dispuesto a enfrentar desafí­os. El diálogo entre las pinturas realizadas entre 1945-54 y las que pintó desde el año 2000 cuando retomó la práctica artí­stica muestran deslizamientos y continuidades, como la reaparición de los motivos de 4 temas circulares en sus Homenajes a Ptolomey. Recuperación de "viejos" temas que permanecieron en la obra y el pensamiento de un hombre que desde su primera juventud intentó transformar el mundo y que, en el presente, invitan a repensar el tiempo de aquella utopí­a.

Info: Hasta el 10 de febrero de 2008,
Museo Nacional de Bellas Artes, Avenida del Libertador 1473