Nota publicada online


Curada por Rodrigo Alonso, Iniesta presenta 23 obras compuestas principalmente collages de papel y objetos ensamblados, organizadas en tres series diferentes.
Para Nora Iniesta el uso del collage la define; es una técnica artística, que aprendió en su infancia. Si bien se formó en pintura y grabado, ella siente que con el collage siempre está pintando. Utiliza imágenes de revistas, especialmente de una colección que pertenecía a su madre y con todo aquello que le “llega” a su taller. Con el collage ganó el reconocido Premio Braque en 1980 lo que le permitió una hacer residencia en Paris. En su trabajo siempre combina su vida personal, la memoria y la historia del arte, creando una mezcla única entre la cultura y lo cotidiano.
Las obras
"Los ocho días de la semana”, es una serie que parte de platos de colección de porcelana, cada uno impreso con una obra de un famoso artista -Van Gogh, Monet y Picasso-, apoyados sobre pasto sintético y con un pequeñísimo personaje que deambula por las icónicas pinturas. ¿Por qué ocho? La serie destaca por su originalidad al incluir un día extra, lo que refleja la picardía de la artista al permitirse estos juegos. Se inspira en un plato inicial y surge de la idea de combinar arte clásico con la cotidianidad. Ésta es, justamente una de las características de la obra de Iniesta: ella recontextualiza objetos cotidianos, originalmente creados para otros usos, y los convierte en obra de arte. Descubre la belleza de objetos banales y los pone en valor.
En la obra "Ciudad Uno" utiliza muestrarios de hilos de colores de una fábrica que dejó de utilizarlos y, con pinceles, arma del estructura de edificios para homenajear a la ciudad de Buenos Aires y su entorno.
"Altos y bajos" sobre una base con bandas celeste y blancas que nos refiere a la Argentina y nuestra inevitable experiencia humana de altibajos. Para expresar esta realidad, utiliza de manera lúdica elementos tan cotidianos y comunes como son los lápices.
A partir de otro muestrario, en este caso de lanas, realizó piezas llamadas "Bariloche" y "Río Negro". Con estos primorosos pompones de lana representa a los habitantes de estas ciudades.

Nora Iniesta trabaja con elementos simples que llegan al taller -flores de plástico, pequeñas figuras de personas o animales-, que son esenciales para su proceso creativo y para composiciones que reflejan la simplicidad y la vida diaria.
Como afirma Rodrigo Alonso en el texto de la muestra, “las obras de Nora Iniesta son una celebración de lo cotidiano transformado en símbolo. En ella florecen las imágenes de antaño, la memoria social, las huellas culturales y el legado artístico, abordados desde un presente lúdico que nos anima a reconfigurarlo todo. Cada uno de sus trabajos pone en funcionamiento un caleidoscopio imaginario que nos interpela en lo más profundo, conceptual y emocionalmente. De ahí que ninguno de ellos nos pueda resultar indiferente."