Nota publicada online


Una muestra que trasciende los límites de una exhibición tradicional. Ideada por Adriana Rosenberg y Andrés Duprat, la experiencia combina la posibilidad de disfrutar de un conjunto de magníficas obras y sumergirse en el universo íntimo y creativo de un artista como Roth.

¿Quién no conoce a Pedro Roth?”
Pedro Roth es un húngaro, fotógrafo, cineasta, pintor, coleccionista, escritor y amigo pero, por sobre todas las cosas, es una gran persona que logró sobrevivir al peor holocausto -algo que pocas veces cuenta, agradecer a la vida y devolverle un sentido.
La actual muestra “Como en casa”, en el Fondo Nacional de las Artes, así lo demuestra. Ideada y curada por Adriana Rosenberg y Andrés Duprat. La muestra en realidad es una gran instalación que reconstruye el universo del artista en la sede Casa Victoria Ocampo. El living, como en su propia casa, desborda de pinturas de muchos de sus amigos artistas. Los artistas de una época poderosa del arte argentino. Obras que muchos marchands han querido comprar pero a lo que Pedro se niega sistemáticamente. “Nunca vendí ni una obra de mi colección, se trata de una colección armada a fuerza de trabajo, más bien, de intercambio de trabajos”. Obras emblemáticas como “Que lindo es estar tirado en la cama viendo TV” de su gran amigo Manuel Peralta Ramos. O las de Tatato Benedit, Yuyo Noé, Marta Minujín, Pier Cantamessa o Juliano Borobio. Cada una tiene su historia y Pedro las revive cada vez que las mira y nos enseña a través de este diálogo el verdadero valor del arte: pura emoción porque, puede haber talento pero, sin una historia detrás, la obra no se sostiene.

El comedor -donado al Fondo por Orly Benzacar- pertenecía a su madre Ruth, verdadera visionaria y gestora de un tiempo inolvidable. Alrededor de esa mesa se sentaron decenas de artistas, críticos y coleccionistas, hoy la rodean las obras de Pedro y nos sumergen en su espíritu arrollador, alegre e invencible. Detrás de su mirada nace una luz transparente que nos descubre su alma; su sonrisa nos trasmite el poder de su fuerza y convicción.
Dos personajes de fuego son los protagonistas de una pintura realizada en 1995. Son Pedro y su padre. “No tengo ninguna imagen clara de él, murió en Auschwitz cuando tenía cinco años”. De eso Pedro habla poco. Él es un sobreviviente; vivió con su madre en el gueto de Varsovia, más tarde se trasladaron a Transilvania y a otros destinos. Siempre huyendo. Finalmente a la edad de 12 años llegó a la Argentina y aquí se quedó. Aquí refundó su vida. Se convirtió en fotógrafo, crio dos hijos y tiene cientos de amigos. Inmortalizó miles de instantes del arte de sus contemporáneos.
Esta muestra, “Como en casa”, es una historia de vida. Resulta inevitable emocionarse ante tantas presencias, tanta complicidad entre amigos, gestores y el propio público.
Gracias al Fondo Nacional de las Artes por el espacio para compartir este tramo de nuestra historia reciente del arte. Gracias a Adriana Rosemberg y Andrés Duprat por esta idea y curaduría excepcional, por este homenaje. Y, por sobre todas las cosas, ¡gracias Pedro Roth por enseñarnos a entender el verdadero valor del ser humano: ser agradecido, compartir y disfrutar del camino recorrido!
Fondo Nacional de las Artes
Casa Victoria Ocampo, Rufino de Elizalde 2831, CABA
De lunes a viernes de 11 a 19 h, con entrada libre
Este viernes 8 de agosto cierra la muestro con un brindis