News Argentina

jueves 17 de julio, 2008
PANORAMA FEDERAL - CORRIENTES
“Sábana y Mantel”
por Fernando Vargas Gómez
PANORAMA FEDERAL - CORRIENTES
 

Milo opone explí­citamente su oferta lúdica ante la resentida sociedad local de conflicto permanente que emociona y espanta. La inocultable sagacidad de la propuesta pictórica evoca la dimensión hedonista del inconsciente colectivo remedando la inocente práctica inicial de intercambio humano, creando muñecos zoo mórficos que escrutan el ambiente.

Milo opone explí­citamente su oferta lúdica ante la resentida sociedad local de conflicto permanente que emociona y espanta. La inocultable sagacidad de la propuesta pictórica evoca la dimensión hedonista del inconsciente colectivo remedando la inocente práctica inicial de intercambio humano, creando muñecos zoo mórficos que escrutan el ambiente. La "personalidad" de estos seres de la fantasí­a infantil asume la sempiterna mirada multi direccional de alerta permanente, acechando en todas direcciones procurando, al tiempo de encontrar un rumbo, averiguar qué ocurre.
En un escenario de ilusiones camufladas cuando la resignación parece orientar el tedio marcando un ritmo de agobio reiterado, sus piezas coloridas irrumpen clamando certidumbre y esperanza que a todo tiempo recuerdan la comunicación intimista del corifeo griego cuando relata la crónica trágica al registrar lo que sucede.
Aplicando un trazo cuidado y firme Milo muestra una factura despojada y prolija al ubicar en el espacio rí­gido de sólo dos dimensiones a seres angustiados y agresivos a partir de la creativa ensoñación compungida que parece asolarlo.
Aunque resulta inocultable abstraerse al dolor contenido en la protesta que develan sus criaturas deformadas, no podemos fundirnos entre ellas; carentes de brazos resultan incapaces aún de aprehender el teatro de relaciones externas. Estas figuras/muñecos evocan la imagen de la visión primaria del adulto en el cerebro del niño cuando la fijación de los ojos y la boca asumen la primer referencia del rostro humano en su memoria.
Bajo este modo resulta consistente prescindir de la harto abusada protesta anacrónica y concebir así­ la oposición inconformista ante el reprochable estado de tantas cosas derrumbadas.
Su impronta asertiva reitera el sentido ordenador de lucidez moral aún ante el desorden prolijo y aseado del provocador graffiti callejero revelando el deseable e infrecuente compromiso emocional ante el banquete de la vida.