Pachi Almeyda y Masako Kano
Mirada Expandida
04/03/2022 - 04/04/2022

ESPACIO HUSSEK
Av. Libertador 13139, Martinez

Pachi Almeyda y Masako Kano

'Estamos condicionados por la cultura y ésta condiciona nuestra percepción. Mirada expandida es la fusión de la percepción del paisaje abstracto en la pintura occidental y  el fotográfico retiniano bajo una mirada Budista Zen. A más de 30 años de la globalización, somos atravesados por ella, esta muestra señala la permeabilidad y la fusión intercultural de miradas'. 

Cecilia Ivanchevich

'En crudo 22-5' 1.00 x 1.30 m acrílico, pigmento, petróleo crudo (cuenca noroeste, neuquina, golfo san jorge y austral) sobre lino 2022 .jpg

Pachi Almeyda selecciona obras de sus últimas producciones para presentar en su exposición “Mirada expandida”. Elige este recorte entre las distintas obras que componen su universo creativo: son años de trabajo artístico, de indagaciones, que se despliega en diferentes tratamientos técnicos.

En ese sentido, me interesa detenerme en la serie “Pizarrones” que inició en 2021 durante la pandemia. Allí la artista remite a las formas y modelos de aprendizaje. Toma el pizarrón como elemento simbólico de la enseñanza, la educación y el aprendizaje, citando a los maestros del arte y la cultura universal, como paradigmas de “modos de relacionamiento”. Es decir, se pregunta de qué forma nos relacionamos para transmitir o potenciar nuestros procesos de intercambio y construcción de ideas. Ella rescata la idea de “conducir, guiar y orientar”, proponiendo así un ida y vuelta y en contra de las posiciones unidireccionales de transmisión de conocimiento e información.

Esta educación que desde distintas corrientes se puede resumir como un proceso interpersonal, ha sido vivenciado por Pachi en distintos momentos de su vida. Recuerda que el artista argentino Luis Felipe Noé escribiera las siguientes palabras en las que ella se siente reflejada hoy en día: “La evolución de una artista es algo así como un viaje en tren: siempre se está en él, pero los paisajes van cambiando. Las estaciones van pautando el trayecto. Para el caso de los artistas visuales, las estaciones son sus exposiciones”.

Esto me recuerda una entrevista que le realizara a Noé en el año 2012 la periodista Celina Chatruc, donde le preguntaba sobre sobre si se podía enseñar el arte. A lo que él responde: “Se puedesuscitar.Suscitarel juego. Porque todo es un juego. Cuando digo juego no digo algo menor, digo ir entendiéndose con la vida, con aproximaciones... Es ir armando el rompecabezas que es la vida, pero desde el propio punto de vista”.

'En crudo 22-5' 1.00 x 1.30 m acrílico, pigmento, petróleo crudo sobre lino 2022 pachi almeyda.jpg

Noé promueve que la enseñanza artística sea “suscitar”, lo cual he compartido en los años de losseminarios de análisis de obraen que he podido acompañar a Noé. También he comprendido que la forma de enseñar que él propone se acerca a un acompañamiento artístico que favorece el encuentro de los artistas con sus propias búsquedas. Uno de sus objetivos era ayudar a la persona a que se entendiera en su propia crisis. Es decir, invitaba a todos los participantes a actuar de espejo, de modo tal que las distintas miradas pudieran expandir y contrastar las posibilidades. Él siempre ha buscado comprender al artista en la crisis, la crisis como parte del proceso creativo y como parte de la vida.

En estos seminarios he conocido a Pachi y desde entonces seguí su obra. En ese sentido, hemos podido transitar un hermoso camino de acompañamiento, a lo largo de su trabajo artístico. Como ella dice: “mientras terminaba de cerrar esta muestra, me di cuenta que estaba pasándome lo que sabiamente Yuyo Noé me escribiera en 2005(*) y digo sabiamente, ya que él sabía que esto iba a suceder”.

Pachi hoy ha logrado reencontrarse con su búsqueda o mejor dicho con sus intereses, y reelaborarlos, para volver a la misma estación, ya con un camino transitado y una mirada expandida.

Fritz Roy y nube

Masako Kano

Durante el período de confinamiento causado por la pandemia global Covid19, solía volver a mirar y editar mis fotografías de paisajes del pasado, deseando capturar nuevamente esos encuentros mágicos que tuve con la naturaleza, tanto aquí en Argentina como en mi país de origen Japón.
Afortunadamente tuve la oportunidad de estudiar fotografía con Diego Ortiz Mujica, cuyas fotografías de los paisajes de los parques nacionales de la Patagonia le han otorgado el nombre de "Ansel Adams de Argentina", y bien dicho, ya que fue discípulo de Ansel Adams.

La fotografía de Ansel es reconocida por su estilo realista. Sus obras retratan las maravillas de los parques naturales mientras van apareciendo, por lo tanto son un tributo increíble a las Altas Sierras, paisajes que uno solo encuentra si viaja y desanda caminos difíciles para llegar al sitio, guiado por su esperanza de verlos. Uno de los legados más importantes que dejó Adams fue cómo su obra fotográfica contribuyó al movimiento conservacionista de Estados Unidos (American conservación movimiento).
Desde que me mudé de Londres a Buenos Aires, siguiendo los pasos de mi marido y su trabajo, empecé a descubrir una maravillosa naturaleza salvaje similar en Argentina.

Nostalgia

Yo nací en una de cuatro islas mayores rodeadas completamente por el mar e islas diminutas, así que esos numerosos encuentros con la naturaleza en los parques nacionales de Argentina me pusieron de rodillas ante la grandiosa existencia de la naturaleza que sostiene la biodiversidad global de esta región al otro lado del mundo,y que pude contemplar con mis propios ojos.
Uno de los encuentros más emotivos que tuve con la naturaleza en Argentina ocurrió una noche en el sitio de acampe donde estábamos filmando el documental "El silencio del Impenetrable". Me encontré con un cactus gigante erguido bajo el cielo estrellado del Impenetrable (el parque nacional Argentino más reciente creada gracias a las suscripción popular para la conservación de animales en peligro de extinción como los jaguares). Inspirada por la frescura de la noche, tras de pasar un día largo filmando bajo un calor intenso; sin poder dormir y escuchando los ronquidos de los otros miembros de la filmación en sus carpas, salí de mía y agarré mi trípode, mi cámara y una linterna para capturar al: enorme cactus que almacenaba agua dentro de su cuerpo para compartirlo con los animales y hasta los humanos cuando llegaban las sequías.

Ambos paisajes de Arashiyama, Kyoto y la orilla del lago Biwa en Shiga reflejan para mí unos paisajes internos míos. Son las escenas que imagino cuando practico mis silenciosos meditaciones zazen. El Budismo Zen pone énfasis en el 'Despertar' del individuo que busca la iluminación. Para mí, crear paisajes internos desde la realidad de la naturaleza de Japón, demuestra mi creencia de que el arte es una forma deespiritualidad.

Masako Kano
4 de marzo, 2022