En un mes condicionado por el paréntesis de Semana Santa la plaza respondió con holgura a las propuestas de nivel.

Sigue siendo escasa, no obstante, la presencia en catálogos de obras de calidad superior.
 El fin de la Semana Santa, que este año dividió en dos segmentos al mes de abril, marcó tradicionalmente el comienzo de la temporada de subastas en el mercado del arte local. Aunque es de justicia el señalar que, desde hace un cierto número de años, algunas firmas suelen iniciar el trají­n de sus martillos en fechas previas a la mencionada celebración religiosa. La creciente dimensión del mercado, determinados apremios económicos derivados del largo receso estival, y la mayor competitividad surgida con la aparición de nuevos operadores, son factores que inciden en esta decisión de mover fichas con anterioridad a lo que se tení­a como inamovible.
 Así­ fue como en las convocatorias de marzo y la primera mitad de abril de este año se vendieron unas 500 obras de autores argentinos por un monto cercano al millón de dólares. Buen resultado para unas subastas en las que, como era de prever, la oferta no mostró nada especial, y ninguno de esos lotes capaces de conmover a coleccionistas e inversores apareció integrando los catálogos. No obstante, la demanda, que como decimos, está para más..., se manifestó con la misma firmeza con que viene haciéndolo en las últimas temporadas, a despecho de ciertas señales, unas veces positivas, y otras veces erráticas, con las que nos suelen azuzar a los argentinos desde los marcos económico, polí­tico y social.

Sobre audacias y comisiones

Entre las novedades de la temporada hay que consignar la decisión de la casa Indigo de reducir del 20 al 15 por ciento la comisión que, sobre el precio de venta, percibe de quienes le confí­an sus obras para su realización. "Buscamos con esto una mayor competitividad", señaló Carlos Casasco Drago, director de esta firma, al explicar la medida. Si bien resulta prematuro hablar de "guerra de comisiones", una vez rota la hasta ahora férrea unanimidad de los martilleros en esta materia, no serí­a de extrañar que otras casas se vean forzadas a seguir el camino que marca Indigo. Incluso es posible que haya quienes, mirando pautas que señala el mercado internacional, analicen la posibilidad de ir trasladando paulatinamente el mayor peso de las comisiones del vendedor al comprador. Cualquier decisión en este sentido implicará una buena dosis de audacia, algo que por cierto no abunda entre los operadores de esta plaza.

Ventas y records

Las subastas de abril tuvieron sus luces más altas en la espléndida "Joven con libro" que Raúl Soldi pintó en 1947 e integró el catálogo de Roldán, y en la atractiva y misteriosa "Torre" de Roberto Aizenberg que presentó Arroyo. La venta en $176.769 de la primera pintura es el valor mayor del mes, a la vez que nuevo récord para figuras de ese tipo debidas al pincel de Soldi. Del mismo modo, los $97.530 pagados por la obra de Aizenberg constituyen el nuevo plusvalor en subastas para este artista.
 Otros buenos valores, que se consignan en la planilla adjunta, lograron sendas obras de Pedro Figari, así­ como un impactante trabajo fechado por Raquel Forner en 1970 y dos pinturas, representativas de dos momentos bien diversos de su producción, del maestro Benito Quinquela Martí­n.
 En VerBo sobresalió un magní­fico tema surrealista de Ví­ctor Chab realizado en 1957. Con destino de gran colección, se vendió en $22.980. También fue disputada en esta subasta una importante escultura de Aldo Paparella, que encontró adquirente en el nivel de los $20.740.

Lo que vendrá

La programación de la temporada entrará en mayo en un perí­odo de alta densidad. Ya son varias las casas porteñas que han concretado sus convocatorias, y el mes culminará con las subastas de arte latinoamericano de Nueva York, donde el arte de nuestro paí­s estará representado por obras de Pettoruti, Xul Solar, Molina Campos, Alicia Penalba, Le Parc, Tomasello, Marta Boto, Iommi y Cánovas entre otros que compartirán las tarimas de Manhattan con los clásicos del continente: Frida Kalho, Botero, Torres-Garcí­a, Rivera, Tamayo, Figari, Lam, Matta, Portinari.

VALORES MÁS ALTOS EN LAS SUBASTAS DE ABRIL DE 2006

1) ROLDÁN (5 de abril)
 SOLDI, Raúl Joven con libro (óleo, 85x60 cm) $ 173.760
 BERNI, Antonio Niño pensativo (óleo, 85x60 cm) $ 119.950
 FIGARI, Pedro Viejos tiempos (óleo, 50x80 cm) u$s 33.630
 QUINQUELA MARTIN, B. Dí­a de trabajo (óleo, 50x70 cm) $ 79.590
 QUINQUELA MARTIN, B. Barco iluminado (óleo, 70x80 cm) $ 70.620

2) BANCO CIUDAD (6 de abril)
 ALONSO, Carlos Composición (óleo, 100x100 cm) $ 22.420
 NIGRO, Adolfo Moradores del rí­o (óleo, 80x100 cm)$ 19.060
 PRESAS, LeopoldoFigura femenina (óleo, 60x55 cm)$ 15.800
 KOEK KOEK, Stephan Amanecer en el puerto (óleo, 33x67 cm) $ 13.120
 BERNI, Antonio Marino amigo de Ramona (gofrado, 80x55) $ 10.090

3) ARROYO (26 de abril)
 FIGARI, Pedro La reina (óleo, 49x62 cm) u$s 40.355
 FORNER, Raquel Bestiario espacial (óleo, 122x120
 cm)$ 100.890
 AIZENBERG, Roberto Torre (óleo, 80x55 cm) $ 97.530
 CENTURION, Emilio Naturaleza muerta roja (óleo, 47x56 cm) $ 44.840
 GAMBARTES, LeonidasDon Piedrita (cromoyeso, 70x50 cm) $ 39.230

4) VERBO (27 de abril)
 CHAB, Ví­ctor Sin tí­tulo (óleo, 100x60 cm)$ 22.980
 PAPARELLA, AldoSin tí­tulo (escultura, alto: 180 cm.) $ 20.740
 ROUX, GuillermoApunte de Sicilia (acuarela, 20x34 cm) $ 13.450
 LYNCH, JustoPuerto (óleo, 31x38 cm) $ 11.210
 BARRAGÁN, Luis Serie Espacial XVI (óleo, 50x40 cm) $4.590