Nota publicada online

miércoles 22 de marzo, 2023
Niní Bernardello
Memoria viva en Tierra del Fuego
Costa Peuser, Marcela
por Marcela Costa Peuser
Niní Bernardello

El Museo Fueguino de Arte (MAF) de la ciudad de Río Grande, Tierra del Fuego inauguró la muestra “Niní Bernardello: Dibujando en el horizonte. Obra múltiple", con curaduría de Matilde Marín, artista visual y actual presidente de la Academia Nacional de Bellas Artes. Organizada por la Secretaría de Cultura, la Editora Cultural y la Dirección de Museos y Patrimonio del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de Tierra del Fuego, es parte del homenaje que le rinden a la artista en el día de su cumpleaños.

Poeta, artista visual y docente, Niní Bernardello (1940-2020) fue, ante todo, una mujer sensible, querida y valorada por todos aquellos que compartieron su camino de vida. Cordobesa -tonada que nunca perdió-, estudió Bellas Artes y, muy joven, unos “bellos ojos celestes” inspiraron su primer poema. “La pluma siempre fluyó fácil y naturalmente; la línea me dio más trabajo”, confiesa en un video que se presenta en el re inaugurado Museo Fueguino de Arte que, a partir de ahora, lleva su nombre.

Niní nació un 18 de marzo en Cosquín, -lugar al que volvería cada enero-, curiosa e inquieta, realizó un viaje iniciático a Bolivia junto a su amiga, la poeta Diana Bellessi. En los 70 logró su licenciatura en Artes en la Universidad de Córdoba y viajó a la Bienal de San Pablo, tras lo cual, residió en Brasil dos años. Regresó al país para instalarse en Buenos Aires y trabajar en la sección de arte de Producciones Melopea, el sello emblemático de música, junto a Litto Nebbia y Mirtha Defilpo; fue la creadora de varias tapas de sus discos. Fueron años de mucha producción y experimentación tanto en artes visuales, en escénicas como en letras. En estos años, de idas y venidas, recibió varios premios y recopiló sus poemas en un libro inédito, “Adentro y afuera”. En los 80, publicó su primer libro de poemas “Espejos de papel”y eligió establecerse y vivir en la Isla Grande de Tierra del Fuego, en Río Grande, junto a su compañera Maribé Achaga; una ciudad que las recibió sin prejuicios y donde Niní se dedicó a la docencia de la plástica en los tres niveles: primaria, secundaria y escuela especial y más tarde a una potente gestión cultural.

Las 75 piezas que se exhiben en la muestra -entre pinturas, dibujos, collages, grabados, fotomontajes y algunos textos-, en una puesta despojada y minimalista bajo la mirada atenta de Matilde Marín, trasmiten sus variadas búsquedas e intereses y dan cuenta de su tremendo oficio y gran sensibilidad. Es el resultado de varios meses de un trabajo de archivo y catalogación por parte de los artistas Maxi López y Laura Llovera convocados por Maribé Achaga.

En sus pinturas, dotadas de un realismo fantástico como el de los sueños, convive su universo infinito, sus amores y desamores; sus luces y sus sombras. En los collages rescata elementos cotidianos para darles otra significación y, en sus libros de artista el tiempo deja su huella como en una bitácora de viaje. Al llegar a Tierra del fuego, Niní se conectó profundamente con la cultura de sus habitantes originarios; los selknam y éstos se convirtieron en los personajes centrales de muchas de sus obras. Supo “escucharlos” para plasmarlos e inmortalizarlos tanto en fotografías intervenidas como en poesías.

***

Mirando siempre el mismo lugar siempre el mismo lugar sin palabras, desértico, áspero.
Soy Selknam, en mí rompe lo primero, lo nunca escrito.
Espalda cubierta. Ojos atónitos silencio muscular, siempre sentada sin poder quemar los deseos.
No hay paredes, un techo cónico abierto al cielo empuja la mirada a los cuatro espacios conocidos.
Antelación del símbolo. Opacidad.
-qué dices mujer en tu caída? - Olvidé todo. Soy Selknam centro de la mirada, sólo fuego y obediencia. Excluida de los ritos sólo canto. En la inmensa noche canto.

La escritura es un mar

el corazón la barca obstinada

atravesando un oleaje eterno de

pavor histórico.

***

Fue “una gran conversadora que supo tejer vínculos con unos y otros”, contó su hermano Gabriel durante la inauguración de la muestra el día sábado. Se trató de una presentación muy conmovedora ya que todos los allí presentes tuvieron relación directa con Niní como amigos, colegas o alumnos. Analía Cubino, actual Ministra de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología se emocionó recordando a su “maestra”.

Como parte de este merecido homenaje, la Editora Cultural de Tierra del Fuego reunió buena parte de su obra poética en un magnífico libro de 600 páginas: Oficio, compilado por Juan Fernando García y diseñado por Fabián Muggeri, que se presentó el día domingo. Pequeñas historias, anécdotas y agradecimientos llegaron de distintos rincones del mundo dando una clara idea de una personalidad capaz de movilizar montañas.

Niní Bernardello fue y será un referente de la cultura y el arte de la región y, el Museo Fueguino de Arte y toda la comunidad artística de Río Grande son ahora los encargados de mantener viva la llama de esta memoria.

"Niní Bernardello: Dibujando en el horizonte. Obra múltiple" puede visitarse en el Museo Fueguino de Arte de Río Grande hasta fines de mayo, 2023

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