Nota publicada online

lunes 4 de febrero, 2013
Marta Minujín, genialmente casada con el arte
Marta Minujín, genialmente casada con el arte

Marta Minujín cumplió 70 años y se casó con el arte. En ocasión del extravagante festejo que realizó en el Malba, publicamos un fragmento de nota que escribió Rodrigo Alonso en conversación con la artista, para nuestra revista interactiva y digital (para tablets) Art gentina.

"Desde muy temprano, Minujín comprendió que la obra artística no podía quedar reducida a un objeto, y que la actividad del espectador tampoco podía limitarse a la mera contemplación. En los años sesenta, su trabajo se constituyó en un arte de agitación, un instrumento para despertar los sentidos y las conciencias, para sacar al espectador de sus rutinas y lanzarlo al desconcierto y la experimentación.

A comienzos de la década de 1960, la artista comienza a realizar objetos usables y happenings. Pinta colchones con colores vibrantes y con ellos construye dispositivos y arquitecturas que estimulan la participación de los espectadores. En 1964 gana el prestigioso Premio Di Tella con las piezas Eróticos en Technicolor y Revuélquese y viva; la primera está compuesta por colchones multicolores suspendidos desde el techo mediante resortes que invitan al público a colgarse de ellos; la segunda es una arquitectura recubierta por colchones similares que se pueden habitar.

Simultáneamente realiza happenings que empujan a los participantes a explorar situaciones insólitas de manera espontánea. El primero, lo ejecuta en París con amigos artistas (La destrucción, 1963). Al año siguiente, irrumpe en el programa televisivo La campana de cristal, con un camión lleno de colchones y gallinas, caballos con baldes de pintura, un grupo de rock envuelto en cintas y fisicoculturistas que reventaban globos ante el público azorado (Cabalgata, 1964)"

.....................................

Art gentina es la primera revista digital interactiva de arte argentino contemporáneo.

Disponible el el App Store de Apple.

…………

Notas más leídas