Nota publicada online

martes 31 de mayo, 2011
Deseos Mutantes en 713 Arte contemporáneo
por Paola Maurizio
Deseos Mutantes en 713 Arte contemporáneo

Desde su inicio en 2006, 713 Arte Contemporáneo se alineó en una concepción de galería que, si bien no es nueva, se ha renovado a partir de nuevas discusiones. En un proyecto ambicioso en cuanto a objetivos, se ha propuesto acompañar a un grupo de artistas en el desarrollo de sus carreras sin descuidar el aspecto comercial de la gestión que, obviamente, es el que sostiene desde lo económico la posibilidad de experimentar con procesos de desarrollo personal y con diversos lenguajes plásticos.

Durante mayo y junio, como celebración de su quinto aniversario, 713 propone hacer un corte sincrónico en su historia y mostrar el estado de situación actual de los artistas que representa y acompaña. De modo que Deseos Mutantes funciona al mismo tiempo como una instantánea de la actualidad de la galería y como una plataforma desde donde proyectarse al futuro.
En las tres blanquísimas, impecables salas del primer piso se exhiben producciones inéditas de 14 de los 17 artistas que integran el staff de la galería. La muestra integra pintura, fotografía, video, instalaciones y objetos confirmando que el hilo conductor que recorre esta propuesta es la investigación, no sólo de lenguajes sino de materiales, recursos y formas expresivas.
La decisión curatorial de no poner referencias a las obras, que tal vez ayuda en muchas ocasiones a experimentar las producciones sin preconceptos, podría resultar una complicación en este caso, ya que los artistas son muchos. Sin embargo, un plano, que conviene pedir al personal de la galería, orienta en el recorrido.
En la Sala 1 instalaciones de Débora Pierpaoli, Carla Graziano y Estanislao Florido irrumpen con sus materialidades tan diversas, desde el video y los dibujos de Florido hasta las ambiguas construcciones de tela de Carla Graziano con su sólida blandura o las inquietantes cerámicas y óleos de Pierpaoli. La brasilera Brigida Baltar muestra delicados dibujos en lápiz, Florencia Levy, exquisitas fotografías de un proyecto llevado a cabo durante una residencia en Corea del Sur y Leila Tschopp, un acrílico de su serie Modelos Ideales.
En la Sala 2, se exponen un óleo Lucía Sorans, una pequeña instalación de Mariela Vita que contrasta y acerca el blanco volumen de una escultura con
la planimetría negra de una carbonilla, además de fotografías de Eugenia Calvo y las construcciones sobre vidrio de Cinthia de Levie realizadas en torno a noticias de los diarios.
Finalmente en la tercera sala una bellísima instalación de Marcela Cabutti, pura sutileza, comparte transparencias, grises y negros con una fotografía de Marcelo de la Fuente. Completan la muestra un díptico de Alejandro Tosso de la serie Todos somos raros, y unos cuadritos con transcripciones de Leticia El Halli Obeid, la última incorporación de la galería.
El conjunto de la muestra refuerza con coherencia la afirmación que realizan los directores de 713 Julia Grosso y Martín Cortés desde la página web:
"cinco años después, tenemos nuevos deseos mutantes de búsquedas, de intercambios, de diferencias; fanáticamente convencidos de que el arte es un revulsivo de sensibilidades al que todos tenemos derecho a desvelar".

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Hasta el 26 de junio
Galería 713 Arte contemporáneo, Defensa 713, San Telmo

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