Desde su formación como diseñador gráfico y artista plástico, Pablo Hofmann propone la renovación del tradicional arte del fileteado a través de técnicas digitales. El resultado es una reinterpretación de Carlos Gardel, conocido también como "El zorzal criollo" y "El morocho del abasto" a la luz de recursos que enriquecen y complejizan los símbolos típicos del tango y el filete porteño, sin desvirtuarlos.