Mundos posibles
10/08/2012 - 10/09/2012

FUNDACIÓN VOCACIÓN HUMANA
Aráoz 1942, Ciudad de Buenos Aires

Mundos posibles

Cocktail inauguración: viernes 10 de agosto a las 19 hs.

Visitas posteriores: comunicarse al 11 4831 4460

Entrada gratuita

Artistas
Eduardo Cetner
Gabriel Sainz
Sebastián Monti
Alejandra Cesaro
María Laura Contreras

Curadora: Sylvie Nante

Imaginar Mundos Posibles sugiere un salto hacia una cartografía que nuestros mapas mundanos ignoran, una cartografía que trastoca nuestro mundo tridimensional y en ocasiones lo trasciende. Los artistas aquí reunidos esbozan universos alternativos tan insospechados como convincentes pues, sin estridencias ni excesos, nos despiertan a una dimensión onírica o a una nueva vigilia visionaria y consiguen, mediante un arduo equilibrio, incorporar lo mágico y las posibilidades de una vida múltiple.

Eduardo Cetner logra captar con una mirada poética y un manejo técnico magistral  el juego incesante  entre la quietud y el movimiento. En sus obras, el tiempo parece suspendido y los protagonistas funcionan como arquetipos que nutren y dan forma a sus pares terrestres. Cultiva, sin prejuicios, la pintura realista. Ha heredado el dominio de los claroscuros de los grandes tenebristas y  posee el secreto de reflejar la luz de tal manera que esos inmensos cielos y glaciares, esos conos de sal, permanecen en la retina y deslumbran a la vez que  seducen por la perfección que ostentan.

Gabriel Sainz juega sin cesar con espacios y tiempos conocidos; los recrea con una maestría y minuciosidad que despiertan empatía e incitan a develar sus misterios. Envueltos en las infinitas gamas de los ocres y sepias, los personajes u objetos del pasado son rescatados a través de una suerte de lente que magnifica y pone en valor aquello postergado. Buzos, dirigibles, televisores y viejas valijas en medios rurales son una constante en sus pinturas y sugieren episodios fragmentarios de una historia que el espectador debe narrar.

Los Nidos de Sebastián Monti  están concebidos como ámbitos en donde se gesta algo primigenio, especies de seminales compuestos por  fibras vegetales que se entretejen a la manera de un texto a descifrar. Ese textus, que en latín significa “tejido”, remite a los materiales más simples de la naturaleza y su factura –si bien producto de una laboriosa búsqueda-  pretende apartarse de los artificios mediante un obrar en donde aflora lo originario.

A través de una amplia paleta de colores saturados o de transparencias sutiles, Alejandra Cesaro transcribe la naturaleza en el lienzo  a la manera hiperrealista o bien acercándose al límite de la pura abstracción.  Si en algunas obras las figuras son casi absorbidas por la fuerza del medio hasta minimizarlas, en otras la artista propone una complementariedad idílica que parece atisbar la presencia de lo trascendente.

En sus recorridos por la ciudad, María Laura Contreras descubre con su cámara mundos ocultos utilizando el fuera de foco, los bajos contrastes y las interacciones con luces artificiales. Las imágenes monocromas son matizadas con fundidos a negro; los colores armónicos fundidos entre sí y los complementarios velados con blanco: técnicas que disimulan lo cotidiano para trocarlo en ensueños  plenos de significados.