Guillermo Otero, fotógrafo y especialista en estética de la imagen, ganó la Mención del público del 18º concurso fotográfico “Gente de mi Ciudad” que organiza el Banco Ciudad, votación realizada a través del Facebook del concurso.  Ganó la fotografía titulada “2 Miradas y los 7 Escudos”.

En la fotografía aparece un niño feliz con su gaseosa, un buzo y la camiseta de la selección argentina de fútbol embebida en su piel con el “10” de su ídolo como referencia absoluta, detenido frente a siete uniformados con cascos y escudos de defensa, de los cuales dos de ellos le regalan su mirada.  La fragilidad y la inocencia del chico en contraposición con la fuerza y la actitud defensiva, impenetrable, de siete adultos descolocados por esa admiración.  ¿La contemplación de los héroes de nuestro tiempo?...  El deber y la pasión no siempre se complementan… Pero, a veces, sucede.

La fotografía fue tomada el 23 de marzo de 2017, en la previa del partido por las eliminatorias entre Argentina y Chile, en el barrio de Núñez, a cuadras del Estadio Monumental, en la calle Victorino de la Plaza al 1800.  Un grupo de policías apostado para comenzar su tarea de custodia de las calles de la ciudad.

El tradicional concurso fotográfico del Banco Ciudad tiene por objetivo estimular y premiar la creatividad, así como propiciar las producciones artísticas independientes; las fotos deben ser tomadas en la Ciudad de Buenos Aires y debe haber al menos una persona en la toma.  Esta temática de divulgar aspectos y costumbres sociales, a través de las presentaciones en las distintas ediciones de “Gente de Mi Ciudad” se puede percibir los cambios a través de los años, al tiempo que promueve la difusión y la conservación del patrimonio cultural.

Guillermo Otero es un “artista de la imagen”.  Un profesional de la estética y, como tal, conocedor de los detalles que hacen que una imagen estética “hable”,  comunique algo.

A los 20 años fundó Metrovisión, una empresa dedicada a la imagen audiovisual. Más tarde, dedicado a la producción de libros trabajó en posicionar los títulos a través de imágenes de alto impacto, tanto visuales como literarias, con estrategias nunca antes utilizadas en el mercado de libros en nuestro país.

Desde hace pocos años volvió a“su primer amor”: la fotografía, una pasión que lo acompaña desde muy chico.  Con solo 7 años se anotó en Foto Club Buenos Aires. Allí hizo sus primeros “pasos” en fotografía.  Actualmente, pone toda su energía en la producción fotográfica.  Aborda los temas más diversos, invitando al espectador a participar en ese “nuevo mundo” creado por él. 

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