El Azem, Karina

Egresada de la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón (actual UNA), 1992.

Recibió el Premio Ugarit, la Beca Fundación Pollock-Krasner, la Beca del Programa Internacional de Intercambio de Artistas de la Secretaría de Cultura de Presidencia de la Nación, la Beca FURP Israel-ANP y  el Subsidio a la Creación de la Fundación Antorchas. Fue Artista en Residencia en los programas Art/Omi en Nueva York, Braziers en Oxfordshire y Wasla en Sinaí, Egipto.

Sus obras forman parte de numerosas colecciones Privadas y Públicas como el Museo Nacional de Bellas Artes, Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Colección Fortabat, MUNTREF Museo de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, MACRO Museo de Arte Contemporáneo de Rosario, MAC Museo de Arte Contemporáneo de Bahía Blanca, Colección Fundación Alon para las Artes, Fundación Konex, Art/Omi, New York, Centro Cultural Sao Paulo, Museo del Barro, Asunción del Paraguay.

Entre sus exposiciones colectivas podemos destacar: Los Hilos del Ritual, Envío argentino a la 14º Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Curitiba, (Museo Oscar Niemeyer), Diagonal Sur 2, Una lectura de la Colección Tedesco por Philippe Cyroulnik (Centro Cultural Borges), Poder, Autoritarismo e Insubodinación, por Damián Cabrera, (Fundación Migliorisi, Asunción del Paraguay), Pinta New York 2013, Envío del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires Emiliano Miliyo/Karina El Azem,  Algunos Artistas/90-Hoy (Fundación Proa), Arte Careyes 2012 (México), El Espacio en Cuestión (Fundación OSDE), …de rasgos árabes (proyecto organizado y producido por la Red de Centros de Cooperación Cultural AECID, con la participación de los Centros Culturales de España en Buenos Aires, El Salvador, México, Santiago de Chile y San Pablo, Brasil), Expreso Bs. As.-Tokyo (Mirai Gallery y D. F., Tokio), Premio OSDE Mención Fotografía (Fundación OSDE), Orden y Correspondencia (Sala GasCo, Santiago de Chile), Contemporáneo 11 (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires), NoTango (Villa Elizabeth, Berlín, Alemania), Fotografía Argentina(Galería Ruta Correa, Friburgo), Marcas Oficiales (Centro Municipal de Exposiciones Subte, Montevideo, Uruguay), II Bienal de Buenos Aires (Museo Nacional de Bellas Artes), Bienal de Arte Contemporáneo, Mención del Jurado (Museo de Arte Contemporáneo de Bahía Blanca), Colecciones de Artistas (Fundación Proa), Das Soll Kunst Sein (Kunstverein, Friburgo), Szene Buenos Aires (Werkforum Dotternhausen, Alemania), Karina El Azem-Eric Fajardo (Galería Ruta Correa, Friburgo) y las Ferias Internacionales de Arte Contemporáneo Pinta Miami, ArtBO, Art Frankurt, FIAC y ARCO 99, representando a la Argentina por el Fondo Nacional de las Artes

Statement

Desde que empecé a trabajar como artista, en los mediados noventa, mi interés estuvo centrado en la influencia  de las artes ornamentales en el desarrollo del arte abstracto del siglo XX. El arte decorativo nació muchos siglos antes que el arte de representación y mediante el rítmo, la simetría y el patrón se comunicaron miradas morales, sociales y religiosas.  La estética funcionalista retomó un largo debate en torno al ornamento como artificio, pero hace tiempo reconocemos a estas manifestaciones con su propia justificación y referencialidad.

Para Gombrich hay  motivos formales que son descubiertos como aptos para encajar en determinadas disposiciones psicológicas que no habían sido satisfechas con anterioridad, estos son creadores de hábito. La Jarra con forma de animal o la columna con forma de hoja de acanto, satisfacen nuestra expectativa de orden. Propone que el artificio es solicitado en la cultura humana para resistir el cambio y perpetuar el presente, lo interpreta como una necesidad biológica.

In 1927, Siegfried Kracauer acuñó la idea  del “mass ornament” .Identificó el fenómeno de la “cultura de masas” en la emergente industria cinematográfica, donde las bailarinas en sus variadas formaciones no eran mas reconocibles como individuos, sus brazos no eran ya partes de un cuerpo , eran líneas en movimientos rítmicos en un arreglo serial que intentaba formar un todo como figura. Kracauer  trazó analogías con los sistemas capitalistas de producción y estableció una relación sociopolítica entre ellos. “ Al final del camino, la vida humana en si misma segurá las huellas de esa ornamentación” , sentenció.

Esas son las ideas que atraviesan mi trabajo, Desde el ornamento al pictograma en  términos éticos y estéticos. 

En mi serie “Delito, Orden y Ornamento” planteó la violencia como elementos ornamentales continuos , donde podemos encontrar patrones de comportamiento que al repetirse y al ser mediatizados y esquematizados pierden su sentido. 

En mis obras actuales parto de la grilla, el entrecuzamiento de líneas “rectas” como construcción virtual de la realidad y como medio para internarme en la percepción del espectador de la  escala, la proporción y el límite dentro de un espacio arquitectónico en relación, a su vez,  al conjunto de premisas sociales y culturales que toda decisión de distorsión e incidente implican.

La producción de mis trabajos comienza con un “prototipo” hecho con cuentas de vidrio, plástico o diferentes materiales bélicos que pego a la manera de un bordado, aludiendo a la tradición artesanal usualmente atribuída a las mujeres.

También a la atracción atávica por lo que brilla, el mito fundacional latinoamericano según el cual, los conquistadores se llevaron el oro a cambio de “espejitos de colores” .

Escaneo estos motivos y los combino y transformo en la computadora, la impresión digital reproduce la textura y evidencia la tensión entre el “original” y la reproducción. 

Karina El Azem