Amalia Montangero, nutrida en el esencialismo más autentico, que convierte cada proceso interior en una rampa de lanzamiento para comunicarse con las mil caras del "otro" en particular y del arte en general, nos interpela desde estas obras de inquietante belleza. Creaciones distintas y parecidas entre si como los sí­mbolos y los signos que le sirven de inspiración.
Amalia maneja con sabidurí­a ancestral las tonalidades de la tieraa y de la naturaleza y arranca de sus entrañas telúricas una saga de animales y visiones intemporales que nos remontan al origen del origen. Crea con sutileza de cirujano, mundos incisivos con marcado contenido etnico-antropológico, quizas porque Amalia intuye que el pintar las raí­ces de lo antiguo y de lo conjetural- como dirí­a Borges- todos los tiempos se mezclan, todos los espacios encuentran su identidad y todas las búisquedas se hacen palpables en la refinada textura de sus cuadros.
Srguramente Amalia, que ha consagrado lo mejor de su vda al arte, presiente que la vuelta a las raí­ces y la fidelidad a las voces interiores, es el mejor refugio de lo esencial. Por eso pinta con dimensiones generosas universos que nos invaden como visiones bañadas en una luz muy metafí­sica. Visiones que subyacen en gran medida en el universo lúdico poético, fantasioso y existencial de todos los seres humanos.
Las obras plasmadas por Amalia, amen de humanas, pertenecen por su temeatica al "imaginario colectivo", como dicen los discí­pulos de Jung. Ellas destilan una belleza formal increí­ble. Al miraralas, se nos vuelven intemporales como las sagas e inprecisas como los sueños.
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"...En las obras de Amalia Montangero es inocultable el impulso vital que las generaron... ella no parte de modelos ni de bocetos previso, el cuadro sucede, es un hecho vital y como tal imprevisible... el uso del color como medio expresivo de primer orden. La exploración de la sensualidad de la materia manifestada en texturas inquietantes, al formulación de grafismos gestuales, el recuerdo ancestral de formas que recuerdan las dejads por el hombre primitivo, son algunos de los elementos que constituyen el universo de su lenguaje plástico..."

Lic. Heriberto Zorrila
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Una crí­tica de mis obras de la exposición en Museo Pueyrredon

Las obras nos miran, nos hacen vulnerables, nos acercan a nuestro centro. Amalia lo ha logrado, se ha convertido en esencial, cumpliendo una misión que le fue dada: expresar en el mundo su propio don, y este, como boomerang, vuelve a ella transformando en creatividad, en una relación que enriquece, que da vigor, sabidurí­a y paz.
Yeyé Juárez
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Regreso a lo Esencial

"... Las obras plasmadas por Amalia, amén de humanas. pertenecen por su temática al "imaginario colectivo", como dicen los discí­pulos de JUng. Ellas destilan una belleza formal increí­oble. Al mirarlas, se nos vuelven intemporales como las sagas e imprecisas como los sueños"
Lic. Liliana Recondo