Notas Artistas

Sobre la obra de Carla Beretta
por María Alicia Vicari*

La vasta obra de Carla Beretta abarca no sólo sus series de carácter pictórico sino también sus grabados y esculturas.
En su colectivo imaginario se destaca al unísono una obra íntima y delicada, pero sensiblemente racional, dejando apreciar cómo una misma línea puede pasar del papel al plano bidimensional y luego manifestarse en el espacio.
 Obra simbólica la de Carla, donde la síntesis de sus imágenes tornan posible un diálogo constante entre las tres disciplinas que aborda.
A lo largo de su rica vida artística ha investigado  indagando en lo más profundo de su ser   y de su historia personal  dando a luz quizás a su serie más trascendente, Testigos,
donde en una suerte de homenaje póstumo a su padre, quien le regala un árbol pequeño, desarrolla toda esta serie. Como la artista misma dice “un árbol como testigo y garante de un crecimiento amparado..”
En cuanto a   la composición se advierte   la necesidad de romper con la rigidez de la geometría manifestándose en relieves donde utiliza la técnica del collage como la gran vedette en toda su obra. . Explora  así en el informalismo, rasgando telitas, hilos, sus propios grabados, sus gofrados, metales encontrados, papeles, etc, es decir utiliza una gran variedad de medios  para abordar la relevancia de la vida diaria, donde el entorno y la realidad les da sentido y hacen que nada esté puesto al azar porque  todo tiene que ver con todo y con el Todo.
Obra minimalista por donde se la mire, sabe contar la historia apoyándose en el lema “Menos es Más” de Mies van der Rohe, tanto en el uso de las formas como del color.
Es éste un momento importante  de la artista en el arte, su obra toda ha dado un giro y se ha transformado en atención a lo sensible, lo subjetivo, lo implícito.
Son sus propias vivencias contadas de innumerables formas, así culmina esta serie Testigos con la producción de un libro de artista, libro objeto de arte  donde logra una síntesis perfecta dando paso quizás, a otra búsqueda, otro Camino, otras miradas, de ella misma y de la de los otros.
Es toda la obra en sí misma una propuesta plástica presentada de una manera contundentemente delicada que pareciera no tener fin. Todo fluye en Beretta, cambia, se enriquece y se expresa in-eternum.

*Rosario,11 de marzo de 2012.