Nota publicada online

martes 10 de junio, 2014
Escenas del 1900
Viajar en el tiempo o al Museo de Arte de Tigre
por Eugenia Garay Basualdo
Escenas del 1900

En una nueva etapa del MAT amplía su visión, va en busca de ampliar su público y se consolida en el campo de las instituciones del arte. 

Con una renovada y acertada propuesta museográfica, que permite que el edificio se luzca en todo su esplendor, el Museo de Arte de Tigre, inauguróEscenas del 1900. Se trata de un conjunto de exposiciones en torno a principios del siglo XX poniendo en valor la colección del museo y con el  aporte de obras de otras colecciones y de artistas contemporáneos.

La idea y la curaduría general se encuentran a cargo de María José Herrera, quien asumió la dirección en enero del corriente. El despliegue curatorial comprende varias escenas que abarcan ambas plantas. En palabras de Herrera: “Escenas del 1900 propone una aproximación a la cultura y la vida cotidiana de comienzos del siglo veinte. La casa, el edificio del entonces Tigre Club, fue pensada para esta exposición como la escenografía original donde se instalan las ficciones simbólicas de las imágenes del pasado y el presente. Apelar a la memoria, ponerla en escena, es en esta propuesta una combinación del rigor –siempre en debate- de la historia con el vuelo imaginario que provee el arte”.

En la sala principal de la planta baja, una puesta en la que conviven obras de la Generación del ’80 – Ernesto de la Cárcova, Reinaldo Giúdici, Eduardo Sívori, Severo Rodríguez Etchart, Javier Maggiolo y Francisco Parisi, con el arte contemporáneo. Se plantea un recorrido en fiel vínculo con el espacio y el tiempo, aquí representados. Las obras de Delia Cancela y Nora Correas, sutiles y sofisticadas, en torno a la imagen de la mujer de fin de siglo dando cuenta de la moda y el lujo, se mezclan con las de Jorge Gamarra y Horacio Zabala, que evocan los elementos propios del Tigre, el mimbre y el adobe, con su pureza y rusticidad. Imágenes de época se proyectan gracias al registro del nuevo invento recién llegado al país en esos tiempos: el cinematógrafo. Otras tantas fotografías, recrean el espíritu del deporte en el Delta, la afición por la náutica y el remo.

Dos salas ocupaDesbordando los géneros: artistas del Ateneo, otra de las escenas a cargo de María Laura Rosa y Georgina Gluzman. Aquí se ponen en valor a tres artistas desconocidas para la historia del arte argentino –Graham Allardice de Witt, María Obligado de Soto y Calvo y Hortensia Berdier- abordando los mismos géneros que los artistas hombres: desnudo, paisaje, escenas cotidianas. Esta inédita propuesta, hecha luz sobre el rol de las mujeres en la formación del campo artístico, sobre su estudio y su análisis.

Otras dos pequeñas salas albergan la historia cotidiana. A través de la puesta en escena de una sala de estar de época, con una cuidada y cálida iluminación, paredes que evidencian el brocato típico –especialmente realizado para la ocasión- y muebles y objetos de estilo, que proponen al visitante conocer la forma de vida de los pioneros tigrenses asiduos del Tigre Club. Asimismo, al lado,Doce cuadros sonoros. Panorama musical de comienzos de siglo XX, con curaduría de Cristian Asato, muestra los diversos estilos musicales vigentes en aquel entonces, con sus aparatos de reproducción, discos y fotografías.

Al subir la glamorosa escalera de mármol blanco y bronce, se encuentra un conjunto de vestidos realizados por Indumenta 2014, que evocan los fabulosos atuendos de las mujeres del Centenario, que lucían en fiestas y banquetes y que los fotógrafos retrataban con libertad expresiva e independencia de los modelos previos de la pintura.

La sala principal de la planta alta albergaEl debate en torno al Centenario. Intención de un arte nacional,a cargo de Valeria Semilla. La misma trata del debate artístico acerca de la existencia de un verdadero arte nacional en vísperas del primer Centenario de la Revolución de Mayo en 1910. Con una vasta selección de obras del MAT y otras colecciones, se aborda la representación del paisaje regional, como peculiaridad, atribuyéndosele ser la clave de la existencia de un arte propio de la joven nación. Con pinturas de Fernando Fader, Jorge Bermúdez y, Alfredo Gramajo Gutiérrez, entre otros, se puede contemplar un extenso panorama en torno al polémico debate de aquel entonces.

Sin dudas, esta nueva etapa del MAT demuestra su consolidación en el campo de las instituciones del arte, brindando al visitante la posibilidad de acercarse a la historia local y nacional a través de la puesta en valor de su patrimonio edilicio y artístico.

 

La muestra puede visitarse hasta el 7 de septiembre 

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